"Es la primera base que se establece con el número de elementos suficientes, con mando único, en Minatitlán vamos a dar respuesta a la demanda de seguridad", dijo el mandatario, quien comenzó una gira de fin de semana por el sureste del país.
La visita estaba programada antes de la masacre perpetrada el 19 de abril por un grupo de hombres armado que asesinó a 13 personas en una fiesta, en una presunta vendetta del crimen organizado que asola esa región recostada sobre las costas del Golfo de México (este).
Cientos de manifestantes recibieron al mandatario en una terminal aérea local con gritos de "¡justicia, justicia!".
El mandatario respondió a los familiares de las víctimas que "habrá justicia, a eso venimos", según los reportes de la televisión local.
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Esta es la primera coordinación instalada en todo el país, y el presidente inaugurará este fin de semana otras dos bases, una en el puerto petrolero de Salina Cruz, Oaxaca, en costas del Pacífico y otra en Cancún, principal destino turístico nacional en las playas del Caribe.
Un proceso de reclutamiento permitirá contar con 250.000 guardias nacionales en 2023, un año antes de que concluya la presente administración federal.
En los primeros cuatro meses del mandato de López Obrador se han registrado 11.372 asesinatos en todo el país, la cifra oficial más alta en ese mismo lapso desde que comenzaron los registros de homicidios dolosos en 1997.
