"Existe una necesidad urgente de establecer corredores humanitarios seguros para los civiles atrapados; por lo tanto, quisiera pedir un cese al fuego inmediato y la reanudación del proceso político", dijo Bachelet en un mensaje de vídeo, difundido por el servicio de prensa de la oficina de la ONU en Ginebra.
#Libya: Grave concerns for thousands of trapped civilians in conflict-affected areas in Tripoli. UN Human Rights Chief @mbachelet urges creation of safe #humanitarian corridors and joins calls for an immediate ceasefire & resumption of political talks.
— UN Human Rights (@UNHumanRights) 30 апреля 2019 г.
👉 https://t.co/cGfu2Lgjco pic.twitter.com/1731w8rIwN
Bachelet expresó su profunda preocupación por el uso de artillería pesada y los ataques aéreos en áreas residenciales de Libia.
Bachelet llamó asimismo a liberar inmediatamente a los refugiados que se encuentran en los centros de detención de Trípoli.
La Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) estima que al menos 3.300 personas están actualmente recluidas en esos centros.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) informó este 30 de abril de 345 muertos y más de 1.600 heridos durante las tres semanas de combates en la zona de Trípoli.
Te puede interesar: "Haftar sobrestimó un poco sus propias fuerzas al lanzar la ofensiva contra Trípoli"
Libia continúa sumida en una crisis desde que el derrocamiento de su líder histórico, Muamar Gadafi, en 2011, derivó en violentos enfrentamientos entre facciones rivales, la aparición de grupos yihadistas y de mafias que se dedican al tráfico de migrantes irregulares de África a Europa.
No obstante, este poder en Trípoli no es considerado legítimo por la Cámara de Representantes, parlamento unicameral con sede en la ciudad de Tobruk (este), con gobierno propio y apoyado por el Ejército Nacional Libio.
El pasado 4 de abril, la crisis libia entró en una nueva espiral de tensión después de que el comandante del Ejército Nacional Libio, mariscal Jalifa Haftar, ordenara una ofensiva contra Trípoli para "liberarla de terroristas".
Tres días más tarde, las fuerzas leales al Gobierno de Unidad Nacional anunciaron la operación Volcán de Ira contra las tropas de Haftar.