El ciberactivista australiano tendrá la posibilidad de salir de la cárcel al cumplir la mitad de la sentencia, dictó la jueza Deborah Taylor en la audiencia que presenció una corresponsal de Sputnik.
La jueza calificó de "grave" el crimen cometido por Assange.
"Usted no compareció ante el tribunal, al huir a la Embajada de Ecuador (…), ni apeló las decisiones judiciales anteriores. Sus acciones fueron encaminadas a obstruir o demorar la justicia. Considero que cometió una infracción grave", dijo.
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Taylor agregó que no optó por sentenciar a Assange a la pena máxima de 12 meses debido a que el ciberactivista le transmitió una carta con disculpas durante la audiencia.
Assange expresó cierto arrepentimiento en la carta que su abogado leyó en apoyo de sus argumentos por mitigar la fuerza de la sentencia contra su cliente.
"Me disculpo sin reservas ante los que consideran que he sido irrespetuoso en la forma en que he conducido mi caso, no era mi intención", transmitió el reputado letrado Mark Summers.
La misiva personal del australiano resume el groso del argumento que su defensa esgrimió en la vista: el miedo de Assange a ser enviado a Estados Unidos en castigo por la publicación de miles de documentos confidenciales en Wikileaks y otros medios desde 2010.
La jueza rechazó todos los argumentos sobre las "circunstancias inusuales, difíciles y diferentes" de la decisión del ahora recluso de solicitar asilo en la Embajada de Ecuador en 2012, burlando así a la Justicia británica.
Assange fue despojado el 11 de abril del asilo que le proporcionaba Ecuador en su embajada en el Reino Unido y detenido por la policía británica por violar las condiciones de su libertad cautelar en 2012.
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Su detención se produjo también debido a que EEUU presentó el mismo 11 de abril una solicitud de extradición para juzgar al ciberactivista australiano por una presunta comisión de delitos de intrusión informática.
El ciberactivista rechazaba su extradición alegando que Suecia lo entregaría a EEUU, donde podía enfrentar la pena capital por haber publicado miles de documentos secretos sobre operaciones del Ejército estadounidense en Irak y Afganistán.
Los cargos contra Assange en Suecia prescribieron en 2017, pero el Reino Unido se negó a levantarle la orden de arresto.