"Las voces libres se enfrentan al lacayismo del activismo mercenario y la prensa "independiente". Lamentablemente se sumaron a la patraña muchas personas que no sabían lo que estaba ocurriendo y que tan pronto comprendieron se fueron a la Fiesta por la Diversidad que había organizado el Cenesex (Centro Nacional de Educación Sexual) según el programa que la prensa extranjera no divulgó", afirmó Castro en su página de Facebook.
Este año, las autoridades decidieron suspender la marcha de la XII jornada, que se está llevando a cabo entre el 7 y el 18 de mayo.
Unas 300 personas portando banderas cubanas y el multicolor estandarte de la comunidad LGTBI, fueron reprimidas por agentes policiales que no permitieron avanzar la marcha por una zona en la que, según las autoridades, no había autorización.
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Castro, directora del Senesex, hizo referencia a un artículo publicado en las redes sociales por el activista italiano Enzo Basile, que cuestionaba las causas de la frustrada marcha alternativa organizada por un sector de la comunidad LGTBI.
Pero los incidentes surgieron "cuando algunos de estos activistas, como era de esperar, decidieron que el objetivo de la marcha no podía ser la "simple" protesta contra la discriminación, sino tenía que ir más allá, es decir, convertirse en algo politizado y antigubernamental", aseguró este activista.
Según su versión, el objetivo principal de los organizadores de la marcha alternativa no era enfrentar a las fuerzas policiales, sino descreditar la labor del Cenesex.
Castro sostuvo en su publicación de Facebook que "la crueldad de la contrarrevolución dedicó el día de las madres a agredir sin piedad la memoria sagrada de mi madre (Vilma Espín, 1930-2007) que me enseñó a reír de lo que no merecía mi atención".
Voces a favor y en contra de la marcha y de la forma en que fue disuelta se multiplicaron en las redes sociales.
