La formación capitaneada por el ultra nacionalista Nigel Farage, que se ha estrenado en estos comicios celebrados el pasado 23 de mayo, acapararía en torno al 33% de los votos, en línea con las previsiones.
Los laboristas de Jeremy Corbyn entrarían terceros, por debajo de los liberal demócratas y con un reparto de los sufragios en torno al 15%, si se mantiene la tendencia.
El partido del Brexit entró en la batalla sin un manifiesto electoral y el objetivo primordial de sacar a Reino Unido de la Unión Europea (UE) sin un acuerdo con Bruselas.
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Farage ha barrido votos de su anterior formación, el UKIP, y sobre todo del electorado conservador que castigó al Gobierno de May por no ser capaz de ejecutar el Brexit en la fecha establecida del pasado marzo y aceptar una prórroga hasta el 31 de octubre.
"Necesitamos ser más claros y mientras no lo hagamos, seguirán castigándonos", admitió la responsable laborista en Exteriores, Emily Thornberry.
La distribución de los 73 eurodiputados del Reino Unido, así como la distribución definitiva del reparto de votos, se conocerán este lunes.
Irlanda del Norte y las regiones isleñas de Escocia comenzarán entonces el recuento de los sufragios.
La participación global se estima en el 37%, tres puntos más que en las anteriores comicios al Parlamento de Estrasburgo y Bruselas.
