"Queremos evitar que la ciudad tenga un alcalde independentista", aseguró Manuel Valls en una rueda de prensa.
Colau quiere un pacto de izquierdas con los socialistas del PSC, que tienen 8 escaños, pero la suma de concejales no alcanzan los 21 votos necesarios para sumar mayoría.
"La prioridad es evitar que Barcelona sea la palanca del independentismo y la capital de una república imaginaria", afirmó Valls, que ofrece sus seis concejales para evitar que ERC se quede con la alcaldía.
Si no hay acuerdos antes del sábado 15 de junio, gobernará automáticamente la fuerza más votada y por tanto Ernest Maragall se quedaría con el gobierno de Barcelona.
Ante esta situación, Valls está dispuesto a dar sus votos "sin pedir nada a cambio".
"No es momento de establecer condiciones previas ni ultimátums. Pido generosidad a todas las candidaturas", afirmó el ex primer ministro francés, que recordó que la política "es en muchas ocasiones elegir la opción menos mala".
La posición de Valls implicaría un acuerdo entre Ada Colau, Manuel Valls y los socialistas del PSC.