"La clave para la distensión en el golfo Pérsico, así como para la estabilidad y el cumplimiento pleno del PAIC, incluida la verificación, se encuentra actualmente en manos de EEUU; todo lo que tienen que hacer ahora es levantar el embargo petrolero ilegítimo, no es un precio muy alto por la normalización y la estabilidad", escribió Uliánov en su cuenta de Twitter.
El 1 de julio pasado, el director general del OIEA, Yukiya Amano, dijo que Irán había superado la cantidad de 300 kilogramos de reservas de uranio enriquecido, permitida por el PAIC.
Irán advirtió que no asumía compromisos sobre el almacenamiento de las reservas de uranio enriquecido.
Uno de los compromisos que asumió Irán para evitar las sanciones internacionales fue no acumular más de 300 kilogramos de uranio enriquecido a un nivel máximo del 3,67%.
En mayo de 2018, Estados Unidos anunció su retirada del acuerdo, acusando a Teherán de continuar en secreto su programa nuclear, pese a que los informes de la OIEA afirman lo contrario, y restableció desde entonces varios paquetes de sanciones contra Irán, incluyendo medidas punitivas contra empresas y entidades financieras de terceros países que hagan negocios con la república islámica.
El 8 de mayo de 2019, el presidente estadounidense, Donald Trump, anunció sanciones a los productos minerales iraníes.
El presidente iraní, Hasán Rohani, estableció entonces un plazo de 60 días para que las naciones europeas y los demás países firmantes del acuerdo tomaran una decisión: seguir las indicaciones de EEUU, o ayudar a Irán a eludir las sanciones.
Mientras tanto, decidió no vender uranio enriquecido ni agua pesada, que eran los compromisos de Teherán para cumplir con lo establecido en el PAIC.