Recordó que la investigación de este tipo de sucesos corre a cargo de la OPAQ y, en particular, su Misión de Búsqueda de Hechos sobre el uso de armas químicas en Siria.
"A diferencia de Estados Unidos, Francia y el Reino Unido, que intentaron impedir el inicio de la investigación al organizar un bombardeo, Siria y los militares rusos crearon las condiciones más favorables para el trabajo de los representantes de la OPAQ", afirmó Shulguín ante la prensa.
El diplomático destacó la reacción de la OPAQ en aquel entonces, que envió sin demora un equipo de expertos a Duma, mientras que EEUU y sus aliados más cercanos culparon inmediatamente a Damasco.
Fueron precisamente los militares rusos, subrayó, los que "garantizaron toda la seguridad física necesaria" a los expertos llegados de La Haya.
A su vez, las autoridades sirias les proporcionaron acceso a todas las instalaciones y los ayudaron a buscar y entrevistar a los testigos, señaló Shulguín.
Las acusaciones se fundamentan solo en los vídeos publicados por sitios web que apoyan la oposición siria.
Tanto el Gobierno sirio como Rusia lo niegan, Moscú sostiene que el supuesto ataque químico fue un montaje.
En la madrugada del 14 de abril, EEUU, Francia y el Reino Unido lanzaron misiles contra instalaciones que, según afirman, Damasco utiliza para fabricar armas químicas.
El 1 de marzo de 2019, la OPAQ presentó un informe de la Misión de Búsqueda de Hechos sobre el presunto ataque en Duma, según el cual "lo más probable" es que se utilizó entonces como arma una sustancia tóxica que contenía cloro reactivo.
