Mientras que Arabia Saudí está gastando sus reservas de oro para cubrir el gasto social debido a los bajos precios del petróleo, Rusia ha endurecido su presupuesto y está registrando un superávit en medio de la amenaza de nuevas sanciones.
Si la tendencia continúa, opina Bloomberg, Rusia tiene la oportunidad de desplazar a Arabia Saudí del cuarto lugar en lo que respecta a cantidad de oro y reservas de divisas. El primer lugar lo ocupa China, seguida de Japón y Suiza.
Las reservas de los bancos centrales determinan la balanza de poder cambiante en el mundo del petróleo.
Influencia en el mercado del petróleo
En perspectiva esto significa que Moscú adquiere más influencia en las discusiones con la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) sobre cuánto se debe reducir la producción.
"La OPEP ya no puede ignorar a Rusia por su importancia como exportador de petróleo y su economía", dijo Elina Ribakova, economista jefa adjunta del Instituto de Finanzas Internacionales de Washington.
El precio del crudo Brent ha caído más de un 20% desde abril hasta situarse en torno a los 57 dólares el barril. Este precio está por debajo de los niveles que la mayoría de los países de la OPEP, incluida Arabia Saudí, necesitan para cubrir el gasto público. Rusia, por su parte, basa su presupuesto en el petróleo a unos 40 dólares el barril.
"Putin está decidido a minimizar los riesgos de refinanciación para Rusia, por lo que apoyó una política fiscal responsable", dijo Charles Robinson, economista jefe de Renaissance Capital.