"Durante el segundo trimestre del año, con datos ajustados por estacionalidad, la tasa de desempleo fue de 3,5% de la población económicamente activa, misma tasa que la del trimestre inmediato anterior", informó el organismo en un informe trimestral.
Entre abril y junio del año en curso 128.291 personas se quedaron sin trabajo, para totalizar 2.014.496 desempleados, según la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo del segundo trimestre.
La población desocupada es definida como "aquella que no trabajó siquiera una hora durante la semana de referencia de la encuesta, pero manifestó su disposición a hacerlo e hizo alguna actividad por obtener empleo".
La población subocupada alcanzó la cifra de 4,2 millones de personas, referida al porcentaje de "población ocupada que tiene la necesidad y disponibilidad de ofertar más tiempo de trabajo de lo que su ocupación actual le demanda".
En cuanto a la "población ocupada informal", que agrupa todas las modalidades de empleo no formal, llegó a 30,9 millones de personas, según la encuesta.
Las labores informales se refieren al "trabajo doméstico remunerado de los hogares, trabajo agropecuario no protegido y trabajadores subordinados que, aunque trabajan en unidades económicas formales, lo hacen en modalidades fuera de la seguridad social".
Con esas cifras, que eliminan el impacto de las estaciones en la actividad económica, la tasa de "informalidad laboral" disminuyó 0,3 puntos porcentuales en el mencionado lapso con relación al trimestre anterior.
Esa población se refiere a la que está "ocupada en unidades económicas no agropecuarias operadas sin registros contables y que funcionan a partir de los recursos del hogar, o de la persona que encabeza la actividad, sin que se constituya como empresa".
Ese sector muestra un aumento de 0,1 puntos porcentuales respecto al primer trimestre de 2019 en la tasa de ocupación en el sector informal.
Las cifras de desempleo han sido cuestionadas por el presidente Andrés Manuel López Obrador, por no incluir a los aprendices de talleres del programa social "Jóvenes Construyendo el Futuro", que suman unos 900.000 beneficiarios, y decenas de miles del programa de subsidios agroforestales para siembra de árboles frutales y maderables llamado Sembrando Vida.
El incremento de 1,3 millones de personas económicamente activas es consecuencia del crecimiento demográfico y de las expectativas que tiene la población de contribuir o no en la actividad económica, puntualiza el informe.