En una escala donde 0 sería total insatisfacción y 10 total satisfacción, "el promedio de satisfacción con la vida en general reporta una calificación de 8,3, ubicándose en el mismo nivel respecto a julio de 2018 y una décima por encima del registrado en igual mes de 2017 [8,2]", indica el informe realizado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
En cuanto a las diferencias según el sexo, en promedio "los hombres alcanzaron un nivel de satisfacción mayor que el de las mujeres: 8,4 frente a 8,2", dice el organismo del Estado con autonomía técnica.
Casi la mitad de personas adultas entrevistadas, un 47,3%, señaló un nivel de satisfacción con valores de 9 o 10, detalla el documento.
Una constante en los estudios, que se realizan desde 2012, ha sido que la población mexicana valora más los aspectos relacionados con la esfera privada de las personas.
"A lo largo de la serie, las relaciones personales son el ámbito mejor valorado, en esta ocasión con una calificación promedio de 8,7 puntos", dice el resumen del estudio.
Los individuos entrevistados muestran mayor insatisfacción con los aspectos que conciernen a los ámbitos públicos.
La satisfacción con la seguridad ciudadana muestra un descenso, de hecho, "es el único dominio que desciende respecto a un año atrás".
"Un 62,7% de población dice que su satisfacción con la seguridad no es mayor a 6 puntos en una escala de 0 a 10", detalla el balance.
Ánimo positivo
El balance anímico en una escala extendida, que va desde -10 hasta +10, indica un "predominio de los estados anímicos positivos sobre los negativos", prosigue el reporte del estudio.
El resultado arroja un promedio 6,3 puntos de balance anímico general.
Esto implica medir el bienestar "más allá del PIB", para centrarnos en reportes sobre la calidad de vida.
Así se descarta el impacto anímico del estancamiento de la economía en 0,0% durante el segundo trimestre de este año, según los resultados del mismo Inegi.
Para medir el "bienestar subjetivo de satisfacción personal", el organismo utiliza instrumentos llamados Biare sobre "aspectos relacionados con experiencias de vida", bajo lineamientos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos, de la que México es miembro.
La encuesta pone atención "no solamente al acceso a bienes y servicios materiales, sino también a cómo experimentan sus circunstancias, en aspectos de calidad de vida no cuantificables en unidades monetarias".
La encuesta semestral se aplicó a una muestra de 2.336 viviendas distribuidas en 32 ciudades de igual cantidad de entidades de la federación mexicana.
A principios de este mes de agosto se publicó que de los casi 125 millones de población total, el 41,9% vive en la pobreza, y el 7,4% en "pobreza extrema", sobre todo concentrada en comunidades indígenas que viven en la miseria.
