"Después de que comenzamos las negociaciones con Estados Unidos, se dio el primer paso - la creación de un centro de coordinación [para una zona de seguridad] (...) pero al mismo tiempo expresamos nuestra advertencia de que no se convertiría en el segundo Manbij", dijo Cavusoglu a los periodistas, refiriéndose a la zona, donde Estados Unidos no cumplió con sus obligaciones con Ankara sobre el retiro de las formaciones kurdas.
Explicó que "Estados Unidos, por los acuerdos que tiene con los terroristas, no mantiene su palabra".
"Podemos ver que comenzaron a demorar el proceso de nuevo", señaló.
Según el canciller turco, "el comportamiento que muestra Estados Unidos no satisface a Ankara".
"Nuestros planes están listos y si nuestra cooperación fracasa, entraremos en la zona nosotros mismos y, como en el caso de [la ciudad siria de] Afrin, la limpiaremos y garantizaremos la estabilidad", añadió el ministro.
Damasco protestó contra el acuerdo que, en su opinión, atenta contra la soberanía y la integridad territorial de Siria y viola el derecho internacional.
El centro de coordinación turco-estadounidense ya es operativo, sin embargo, las partes todavía no han decidido sobre la extensión de la zona de seguridad y las negociaciones están en curso.
Posteriormente, EEUU y Turquía acordaron empezar la primera fase del plan sobre la zona de seguridad que consiste en el patrullaje conjunto.
