El defensor de derechos humanos y director de la Fundación Progresar, Wilfredo Cañizales, fue quien hizo públicas las fotografías del líder opositor venezolano Juan Guaidó con miembros de la banda narcoparamilitar colombiana Los Rastrojos en febrero de este año. Tras el revuelo, explicó la complicidad del gobierno colombiano con grupos criminales.
"Los Rastrojos es un grupo de paramilitares que está en Puerto Santander desde 2012, y ha sido acusado por cometer más de 150 homicidios. Este año pusimos en conocimiento del gobierno que este grupo tenía una casa donde se descuartizaba a la gente. Los comandantes de Los Rastrojes operan con complacencia de sectores de la fuerza pública colombiana", señaló.

Según estimo Cañizales, en aquel momento tanto el gobierno colombiano como la oposición venezolana buscaban una excusa para invadir militarmente Venezuela.
"Esta situación la denunciamos en febrero, porque teníamos información de que se programaron actos violentos, pero les salió mal. Estaban esperaban una respuesta violenta del lado venezolano. Estaban esperando a que sonara el primer disparo para agredir a Venezuela pero no pudieron", adujo.

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