"Trabajaremos mancomunadamente con el organismo mundial para reparar los daños y preservar el valor del patrimonio material e inmaterial de las Misiones de la Chiquitanía, aunque estos todavía no están precisados porque siguen en desarrollo las tareas de sofocación de los incendios", declaró Alanoca.
La funcionaria explicó que la Unesco (Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura), con sede en París, colaboraría tanto con expertos como con recursos económicos.
Constituyen actualmente los núcleos urbanos más importantes de la Chiquitanía, la región del departamento de Santa Cruz en la que los incendios forestales aún no extinguidos del todo arrasaron al menos dos millones de hectáreas de bosques y pastizales.
Autoridades de la Chiquitanía no precisaron hasta ahora el alcance de daños provocados por los incendios en templos y otros inmuebles importantes de las misiones, que son atractivo turístico de la región, aunque confirmaron la destrucción de senderos, edificaciones menores y reservas naturales.
Alanoca dijo que el Gobierno boliviano envió una carta a la Unesco solicitando que el Fondo de Emergencia para el Patrimonio Cultural de ese organismo envíe una misión de evaluación a los sitios afectados.
Esa misión llegará en los próximos días y trabajará con el Gobierno nacional, el gobierno departamental de Santa Cruz y los municipios chiquitanos, para determinar los daños y definir acciones inmediatas, señaló la ministra.