"El Gobierno de Perú debe tener una posición fuerte al impedir que esos hechos se manifiesten", dijo a esta agencia el parlamentario venezolano Freddy Valera, integrante del partido opositor Acción Democrática.
Esta semana, la congresista del opositor partido fujimorista peruano Esther Saavedra encabezó los titulares de la prensa internacional al pronunciar un polémico discurso en el que indicó que los venezolanos debían irse de su país.
El legislador venezolano Ramón Lobo, del gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela, condenó tales señalamientos en entrevista con Sputnik y acusó tanto al poder legislativo como ejecutivo peruano de tener responsabilidad en el incremento de la xenofobia.
"Debemos lamentar la posición que ha asumido el Gobierno peruano, tanto en el ámbito ejecutivo, como legislativo, donde no han querido desarrollar ninguna actividad eficiente a buscar la manera de frenar y de buscar esa agresión en contra de los migrantes venezolanos que se encuentran en ese país", apuntó el legislador.
De acuerdo con el más reciente informe que publicó la Agencia de la Organización de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur), 800.000 venezolanos viven en Perú, y de ese grupo 280.000 han solicitado condición de refugiados.
El departamento peruano de Tacna (sur), fronterizo con Chile, fue escenario de protestas y a través de las redes sociales circularon videos en los que se escuchaban frases como: "Maduro llévate a tu basura", dirigido al presidente venezolanos Nicolás Maduro y hacia los venezolanos.
Este gran flujo migratorio en ciudades que carecen de un sistema público eficiente incluso para la atención de los propios peruanos, a juicio de Valera genera "escozor por el trabajo, por el desplazamiento, muchas razones pueden darse".
Por tanto, considera que desde Venezuela debe darse cuanto antes una respuesta para que los venezolanos no tengan que emigrar o incluso decidan retornar.
Ansiado retorno
Volver a su nación es el sueño de los venezolanos que residen en Perú, y que han sido objeto de mal trato por parte de los habitantes de ese país.
"¿Qué sentimos?, rabia y terminamos llorando, pero lo que más temor me da es que lleguen a meterse con mis hijos, siendo por su futuro que estoy aquí", agregó.
Los compañeros de Morales, también venezolanos, prefirieron no dar sus nombres por temor a represalias, pero confesaron a esta agencia que entre sus propios colegas reciben comentarios xenófobos.
"Es muy desagradable, una de las compañeras con el tema de nuevos ingresos dijo: "¿van a contratar a otra venezolana?", porque esos vinieron a quitarnos el trabajo", añadió.
De acuerdo con un estudio realizado por Acnur, el 62% de los venezolanos entrevistados en Perú manifestó haber sentido discriminación.
Lo entrevistados por esta agencia requirieron de parte de las autoridades peruanas desarrollar una respuesta que ayude a reducir este tipo de hechos.
El Gobierno de venezolano ha repudiado estos actos y ha acusado al Gobierno de Perú de instigarlos.
Situación de Venezuela
La nación caribeña afronta una de las mayores crisis económicas de su historia, que amenaza con agravarse ante el incremento de sanciones por parte de EEUU, de las cuales algunas apuntan a su principal fuente de ingresos: el petróleo, cuya exportación ha mermado significativamente en los últimos años.
“Yo me voy porque por más que busco como resolver, trabajar, hacer cosas por fuera, ya no puedo ni pagar el colegio de mis dos hijos, aspiro conseguir un trabajo afuera que me permita al menos cubrir lo básico”, afirmó a esta agencia Emy Agostini, quien antes de finalizar octubre tiene previsto emigrar de Venezuela.
Para Lobo, los grandes medios de comunicación tienen también responsabilidad en el incremento de la migración venezolana “porque han vendido ciudades milagrosas, paraísos, para aumentar la migración y resulta que cuando llegan la realidad es otra”.
“Los venezolanos y venezolanas están allá (en Perú) por una situación económica inducida, inclusive por medios de comunicación, que buscando debilitar al Gobierno venezolano generaron una campaña sistemática, vendiendo países milagrosos”, agregó.
Otra visión
El parlamentario oficialista relató a esta agencia que su país siempre fue, especialmente en los años 80, una nación receptora migrantes.
Juan Morales, peruano, quien regresó a su país tras 30 años viviendo en Venezuela dijo a Sputnik que en los años 80 llegó a Venezuela buscando oportunidades ante la crisis que vivía su nación.
“Estoy en Perú después de 30 años y llegué como un venezolano más, solo que con papeles del Perú y cara de peruano, por eso no me dicen nada, pero en Venezuela jamás sentí xenofobia, pero pedían visa y me metieron preso y me deportaron dos veces por estar ilegal, y luego volví y trabajaba escondido hasta que Luis Herrera (expresidente venezolano 1979 -1984) otorgó permisos para regularizarnos, tampoco fue tan fácil”, agregó.
“Primero fueron bien recibidos, pero han pasado muchas cosas, y siempre acaban involucrando venezolanos, y aunque no deberían pagar, lamentablemente es así”, expuso.
Un estudio presentado en mayo por la Policía Nacional de Perú, denominado “Impacto de la migración de extranjeros en la incidencia de la criminalidad en el Perú”, revela que entre 2016 y mayo de 2019 los venezolanos protagonizaron 5.767 denuncias por hechos delictivos.
Esa cifra está por encima de la reportada por delincuentes de otros países, y el más cercano es Colombia con 1.530, pero representa solo el seis por ciento del total de hechos delictivos cometidos en el país, que según ese estudio fue de 870.000 delitos en ese lapso.