"Es ahora más importante que nunca apoyar a las mujeres y hombres que siguen decididamente comprometidos con la paz a transformar sus vidas y las de sus familias y comunidades", dijo Carlos Ruiz Massieu, representante Especial del Secretario General y Jefe de la Misión de la ONU en Colombia.
Aunque la ONU reconoció que el Gobierno colombiano impulsó proyectos productivos para los exguerrilleros en vías de reinserción, subrayó que "se necesitan más esfuerzos", ya que los beneficios sólo amparan al 14,7% de los cerca de 11.000 guerrilleros desmovilizados.
"Es clave acelerar el ritmo de los desembolsos de financiación y garantizar el acceso a tierras", señaló Ruiz Massieu.
Asimismo, destacó la preocupación por parte de la ONU ante la continuidad de las amenazas y asesinatos de líderes sociales y defensores de derechos humanos en el país, las cuales se presentan, sobre todo, en las antiguas zonas de conflicto por parte de grupos armados ilegales que buscan hacerse con hectáreas para el cultivo de coca (insumo base para la fabricación de cocaína) y rutas para el narcotráfico.
Por su parte, el Consejo de Seguridad de la ONU condenó el rearme anunciado el pasado 29 de agosto por los exlíderes de FARC y políticos Iván Márquez y Seuxis Paucias Hernández (Jesús Santrich) y consideró que esa posición demuestra que el proceso de paz está vigente y que los disidentes están equivocados con su proceder.
"Jamás será más importante que ahora acelerar la implementación del Acuerdo de Paz para demostrar que esos disidentes de las FARC están equivocados", dijo el embajador Jürgen Schulz, representante Permanente Adjunto de Alemania ante las Naciones Unidas.
Mientras, el canciller de Colombia, Carlos Holmes Trujillo, señaló ante la urgencia manifiesta de la ONU para la implementación de la paz, que la misma toma varios años en concretarse.
Asimismo, destacó que "llevar el Estado de derecho, la seguridad física y jurídica, y los servicios de cada una de las instituciones públicas a todas las regiones del país, es un compromiso que no se agota en la implementación de lo acordado".
Por último, el canciller colombiano destacó que la implementación de la paz en Colombia "es irreversible" y que requiere del compromiso y del acompañamiento de la comunidad internacional.