Ubicada en la Patagonia argentina, la península Mitre en Tierra del Fuego es una zona clave en la captura de dióxido de carbono (CO2). Se trata del lugar con mayor absorción de CO2 en Argentina, de acuerdo con un informe de National Geographic Society y el centro Mundial de Vigilancia de la Conservación de Naciones Unidas.
Las turberas cumplen una función importante en la regulación del ciclo de carbono. Son capaces de captar en forma indefinida el dióxido de carbono transformándolo en materia orgánica y crecen indefinidamente, según describe un comunicado difundido por la ONG 'Sin azul no hay verde'.
Ante la crisis climática mundial, la función de estas turberas es clave frente al desborde de emisiones mundiales de CO2 y otros gases de efecto invernadero, los principales causantes del calentamiento global.
Un desequilibrio en los drenajes de agua de la turberas puede hacer que la materia orgánica se seque y se descomponga. Cuando esto pasa, todo el material que se acumuló a lo largo de miles de años regresa a la atmósfera aumentando el efecto invernadero, advierte el documento.
"En América del Sur, la concentración más importante de turberas extratropicales están ubicadas en Península Mitre, donde se encuentra la principal concentración de turberas del Argentina con 2.400 kilómetros cuadrados de turba", explica en el comunicado Rodolfo Iturraspe, secretario de Ciencia y Tecnología de la Universidad Nacional de Tierra del Fuego.
Desde hace más de 17 años distintos actores locales piden la sanción de una ley que reconozca a la zona como Parque Provincial, para así conservar este valioso ecosistema. El informe final sobre Península de Mitre será presentado en diciembre en Chile, durante la Conferencia de las Partes de la Convención Marco de Naciones Unidas sobre Cambio Climático (COP25).