La operación "termina, y todo dependerá del cumplimiento de los acuerdos, incluidos los de la retirada de armas, fuerzas y equipos de las unidades kurdas en cuestión, las llamadas fuerzas de autodefensa kurdosirias", respondió Lavrov a la pregunta correspondiente.
La ofensiva apunta contra las formaciones lideradas por los kurdos, entre ellas las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS), las milicias del Partido de la Unión Democrática (PYD) y las Unidades de Protección Popular (YPG) que controlan el noreste sirio y a las que Turquía vincula con el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), al que considera terrorista.
El 17 de octubre el vicepresidente de EEUU, Mike Pence, anunció que había acordado con el líder turco un cese del fuego en Siria por 120 horas para que los kurdosirios retiren sus fuerzas a unos 30 kilómetros de la frontera turca.
Se precisa en el documento que los uniformados rusos y sirios contribuirán a la retirada de las fuerzas kurdas y sus armas a 30 kilómetros de la frontera sirio-turca que debe completarse dentro de 150 horas desde el mediodía del 23 de octubre.
Según el documento, a partir de ese momento comenzará el patrullaje ruso-turco a 10 kilómetros de la frontera, al este y al oeste de la zona de la operación militar turca, excepto la ciudad de Qamishli.