"Estoy conversando con el ministro de Justicia [Sérgio Moro] lo que se puede hacer para tomar…para que la Policía tome declaración [del portero] de nuevo", declaró Bolsonaro desde Arabia Saudí, donde se encuentra en viaje oficial, según recoge el portal de noticias local UOL.
El líder brasileño cree que el portero citó su nombre en la investigación policial porque "se equivocó o no leyó lo que firmó".
Añadió que el comisario que lleva el caso podría haber escrito cualquier cosa y pedirle que firmara, algo que en su opinión podría haber ocurrido porque se trata de "una persona humilde".
A un año de su asesinato, Marielle Franco pone a @jairbolsonaro Bolsonaro entre la espada y la pared https://t.co/LTjuCTAN9p
— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) 14 марта 2019 г.
Por su parte, Sérgio Moro pidió a la Procuraduría General de la República que investigue la mención a Jair Bolsonaro en la investigación sobre el asesinato de la concejala Marielle Franco.
Un reportaje de la TV Globo local, difundido la noche del 29 de octubre, relató que el portero de la urbanización donde Bolsonaro mantiene su residencia en Río de Janeiro (sureste) afirmó que el presunto asesino de Franco, Ronnie Lessa, pidió ir a la casa del presidente justo en el día del asesinato, el 14 de marzo de 2018.
Según la versión del portero, dada a la Policía, alguien con la voz de Bolsonaro autorizó la entrada de Lessa en la urbanización.
No obstante, ese día Bolsonaro, que por entonces era parlamentario, no estaba en Río sino en Brasilia, según consta en el registro de asistencia de la Cámara de Diputados.
El ministro resalta que, en ese caso, podría configurarse un delito de obstrucción a la Justicia, falso testimonio y denuncia calumniosa.
No obstante, el ministro también baraja la posibilidad de que el portero en cuestión simplemente se equivocara al testificar o que fuera utilizado inconscientemente por terceros.
La postura de Moro está en línea con lo defendido por el presidente Bolsonaro, que aseguró que el portero podría haber sido engañado, barajando incluso la posibilidad de que el comisario que lleva el caso redactara una conclusión y lo invitara a firmarla.
Bolsonaro también acusó al gobernador de Río de Janeiro, Wilson Witzel, de haber filtrado a la prensa los detalles de la investigación con el objetivo de desgastarle.
Witzel también es un político de ultraderecha y consiguió ser elegido en Río, en parte, gracias a su proximidad con Bolsonaro, a pesar de que pertenecen a partidos diferentes.
En los últimos meses se distanciaron y Witzel ya ha dicho que pretende ser candidato a presidente en 2022; Bolsonaro cree que ese es el motivo por el que es atacado.
Partidos de la oposición y familiares de la concejala Franco calificaron como gravísimas las revelaciones en las que aparece el nombre de Bolsonaro en la investigación oficial de la Policía.
Franco pertenecía al Partido Socialismo y Libertad y era una destacada defensora de los derechos humanos y de las minorías.
Fue asesinada la noche del 14 de marzo de 2018 de varios tiros en la cabeza junto a Anderson Gomes, el conductor del vehículo en el que viajaba.
Los dos presuntos asesinos, Ronnie Lessa, y Élcio de Queiroz fueron detenidos en marzo del año 2019 y están presos, pero aún falta averiguar quiénes mandaron matar a la concejala y por qué.