"Como pastores de la Iglesia Católica en el Chocó y en Cali, acudimos a ustedes para urgir la libertad de estas personas retenidas en su poder: Freddy Rangel, Diana María Toro Vélez, Tulio Mosquera Asprilla", indicaron en un comunicado Darío de Jesús Monsalve, arzobispo de Cali; Juan Carlos Barreto, obispo de Quibdó (Chocó, noroeste); Mario de Jesús Álvarez, obispo de Istmina-Tadó (Chocó), y Hugo Torres, obispo de Apartadó (Antioquia, noroeste).
Asimismo, se manifestaron atentos a una acción humanitaria que facilite la liberación de esos tres secuestrados, de quienes no dieron más información.
Tras conocer la misiva, el Gobierno colombiano también hizo un llamado a ese guerrilla para que deje en libertad a las personas que mantiene secuestradas, y que es una de las condiciones del Ejecutivo para retomar con ese grupo los diálogos de paz, rotos en febrero pasado tras un atentado del ELN a una escuela de Policía en Bogotá.
"El Gobierno Nacional valora esta urgencia que manifiestan los obispos de liberar a los secuestrados que están en manos del ELN, quienes ya llevan varios meses secuestrados", dijo el alto comisionado de Paz, Miguel Ceballos, informó su despacho.
Por su parte, el presidente colombiano, Iván Duque, reiteró que sólo retomará los diálogos con el ELN cuando deje en libertad a los secuestrados y cese sus acciones.
"He sido claro sobre dos premisas: si el ELN tiene un compromiso de paz con Colombia, tiene que liberar a todos los secuestrados y ponerles fin a las acciones criminales, de lo contrario, terminamos validando la violencia", dijo durante una entrevista en el marco del Foro del Canal 1 'Rol del sector privado en el presente y el futuro de Colombia', en Bogotá.
Las declaraciones del Gobierno se dan luego de que la semana pasada el Comité del Paro, que lidera una serie de marchas contra el Gobierno, entregó un pliego de trece peticiones al Ejecutivo, entre las que se cuenta retomar los diálogos de paz con el ELN, cuyos negociadores permanecen en La Habana.