"El Secretario de Estado de EEUU Pompeo miente de forma desvergonzada cuando imputa a Cuba la justa y legítima protesta de los pueblos latinoamericanos frente a las salvajes políticas neoliberales y la brutal represión. Cesen la Doctrina Monroe, la dominación y la intervención imperialista en América Latina", escribió el canciller en su cuenta de la red social Twitter.
El Sec de Est #EEUU Pompeo miente de forma desvergonzada cuando imputa a #Cuba la justa y legítima protesta de los pueblos latinoamericanos vs las salvajes políticas neoliberales y la brutal represión. Cesen la Doctrina Monroe, la dominación y la intervención imperialista en AL
— Bruno Rodríguez P (@BrunoRguezP) December 2, 2019
Durante un discurso ofrecido el lunes en la Universidad de Louisville, estado de Kentucky (centro-este), Pompeo acusó a los Gobiernos de Cuba y Venezuela de promover los más recientes estallidos sociales en Chile, Bolivia, y Ecuador, entre otros países latinoamericanos.
Pompeo reiteró las acusaciones contra La Habana de mantener "miles de agentes de inteligencia cubanos", los que, dijo, "son el soporte vital de régimen de (presidente de Venezuela Nicolás) Maduro".
El jefe de la diplomacia estadounidense reconoció además que la Casa Blanca ha incrementado sus sanciones contra la isla, haciendo retroceder todo el proceso de normalización de relaciones entre Washington y La Habana iniciado en 2014 por la anterior administración que presidió Barack Obama (2009-2017).
"Hemos echado atrás algunos de los acercamientos con Cuba aplicando nuevas sanciones. Reconocemos que el acercamiento no mejoró el historial de derechos humanos del régimen cubano ni impidió que interfiriera ilegalmente en Venezuela", aseguró Pompeo.
A pesar de las denuncias de EEUU contra Cuba y Venezuela, 1.322 representantes de 789 organizaciones de movimientos sociales y populares, plataformas, partidos e intelectuales procedentes de 86 países reunidos en La Habana el pasado 3 de noviembre, reconocieron como causa principal de estas explosiones sociales en Latinoamérica al "agotamiento social ante la ofensiva imperialista de la derecha oligárquica".
