"El régimen iraní utiliza sus industrias de aviación y transporte marítimo para suministrar armas a sus grupos terroristas y seguidores regionales, lo que contribuye directamente a las devastadoras crisis humanitarias en Siria y Yemen", dijo el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, en el comunicado.
"Las industrias de la aviación y el transporte marítimo deben estar atentos y no permitir que sus industrias sean explotadas por terroristas", añadió.
EEUU redobló su presión contra Irán a partir de mayo de 2018, cuando se retiró del acuerdo internacional conocido como Plan de Acción Integral Conjunto (PAIC), que establece una serie de limitaciones al programa nuclear iraní para excluir su posible dimensión militar, a cambio del levantamiento de sanciones.
Washington abandonó el PAIC, suscrito también por Rusia, Reino Unido, China, Francia y Alemania, arguyendo que Teherán seguía desarrollando armas nucleares.
Un año después, Irán comenzó a recortar gradualmente el cumplimiento de sus compromisos nucleares ante la falta de avance del resto de países signatarios para contrarrestar las restricciones estadounidenses.
