"La CIDH saluda que en estos primeros seis meses de Gobierno, la tasa de homicidios se haya reducido drásticamente hasta alcanzar aproximadamente 50 por cada 100.000 habitantes, con las cifras más bajas desde los acuerdos de paz", indica el informe.
"Los altos índices de criminalidad en El Salvador han sido un tema de preocupación permanente en las agendas de los distintos Gobiernos del país, los cuales han implementado desde políticas de "mano dura" hasta "treguas" con las pandillas y maras", indica el reporte.
La CIDH se reunió con autoridades de los tres poderes del Estado y de órganos autónomos, con representantes y organizaciones de la sociedad civil, organismos internacionales, académicos y periodistas.
Esos testimonios indicaron que en los cinco años de la administración del Gobierno anterior, se registraron al menos 2.173 enfrentamientos armados, los cuales provocaron la muerte de 1.930 personas y de estas muertes, el 96,8% fueron civiles, la mayoría identificados como miembros de pandillas según la versión policial.
Según información de las organizaciones de la sociedad civil, la relación de muerte más alta fue en 2018, cuando se reportaron 106 civiles fallecidos en enfrentamientos por cada policía o militar fallecido.
La CIDH observó que el presupuesto en tareas de Defensa aumentó en 17,9% para 2020 en comparación con 2019.
Adicionalmente, según información de la Fiscalía General de la República, en 2018 se registraron 3.289 desapariciones y, entre enero y diciembre de este año, se reportaron 3.030 denuncias de personas desaparecidas, lo que representa un promedio de 10 desapariciones por día.
Según el World Prison Population List, El Salvador es el segundo país del mundo con la mayor tasa de encarcelamiento, con 604 por cada 100.000 habitantes.
"Si bien la tasa de hacinamiento promedio en las cárceles es de 142, llama la atención de la Comisión que algunos centros penales tienen hasta un 600% de hacinamiento", indica el informe.
Asimismo, durante la visita, la Comisión observó algunas celdas específicas con alto nivel hacinamiento; por ejemplo, en su visita al Centro Penal de Izalco I (noroeste), la Comisión observó a 94 personas recluidas en celdas con capacidad para 28 personas.
Por otra parte, el Estado informó que el 72,43% de la población privada de libertad se encuentra condenada y el 27,57% procesada.
La CIDH también visitó albergues para mujeres víctimas y sobrevivientes de violencia y sus hijos e hijas, albergues y espacios de acogida y hospitalidad mantenidos por organizaciones de la sociedad civil y realizó un recorrido por una comunidad fronteriza afectada por los distintos fenómenos de la movilidad y el desplazamiento forzado que afectan al país.
La Comisión resaltó en su informe el gesto del Gobierno salvadoreño de recibirla en los primeros seis meses de gestión y luego de 32 años.
Nayib Bukele ganó en primera vuelta las presidenciales del 3 de febrero pasado con el 53,03% de los votos válidos, como candidato de la derechista Gran Alianza por la Unidad Nacional, después de que su partido, Nuevas Ideas, no pudo ser inscrito a tiempo en el Tribunal Supremo Electoral.
Según datos del periódico La Prensa Gráfica de principios de diciembre, el mandatario goza del 88% de aprobación popular, el nivel más alto obtenido por un presidente al iniciar su segundo trimestre de Gobierno.