"Nosotros hacemos el llamado a distintos sectores, distintos actores de la educación y sectores sociales a que se movilicen, porque la solidaridad, el apañe mutuo y las ganas de cambiar esta sociedad tienen que ir primero, y nos vamos a estar manifestando esos días", dijo el vocero de la ACES, Víctor Chanfreau, en conferencia de prensa.
El 6 y 7 de enero realizó en Chile la PSU, que permite a los estudiantes ingresar a la educación superior, pero la ACES y otras organizaciones de alumnos organizaron un boicot a través de protestas y filtraciones de respuestas que dejó a más del 10% del estudiantado sin poder rendirla.
"Llamamos a tener empatía con el movimiento, hoy existen cuestionamientos al modelo educativo de mercado y ahora tenemos una posibilidad de cambiarlo, para que seamos todos quienes podamos ingresar a la educación superior y no solo algunos", señaló el dirigente.
La PSU es la prueba nacional que deben rendir los estudiantes secundarios para matricularse en una universidad o un instituto técnico superior y consta de cuatro pruebas: lenguaje, matemáticas, historias y ciencias.
Las organizaciones de estudiantes critican el sistema de la PSU, asegurando que es una herramienta segregadora que privilegia a aquellos alumnos que egresan de colegios privados y de estratos sociales altos.