El portavoz del ministerio de Exteriores israelí, Lior Haiat, afirmó en un comunicado emitido en Twitter que "seguir estas políticas y conductas es la mejor manera de asegurarse de que el papel de la UE en cualquier proceso (de paz) quedará minimizado".
"El hecho de que el alto representante de la UE, Josep Borrell, escoja utilizar un lenguaje amenazante contra Israel tan poco después de haber asumido su cargo y solo horas después de sus reuniones con Irán es lamentable y, como mínimo, extraño", añadió Haiat.
Una semana después de que Trump presentara su plan en la Casa Blanca, de la mano del primer ministro israelí en funciones, Benjamín Netanyahu, la UE reaccionó en bloque públicamente para rechazar la propuesta, que viola el derecho internacional y contradice la visión europea sobre la solución de dos Estados.
"En línea con el derecho internacional y las resoluciones relevantes del Consejo de Seguridad de la ONU, la UE no reconoce la soberanía de Israel sobre los territorios ocupados desde 1967", afirmó en un comunicado Borrell, al que se consideraba más favorable a Israel que su antecesora en el cargo, la italiana Federica Mogherini.
Los socios europeos están comprometidos, desde que empezó el proceso de paz hace casi 30 años, con una solución de dos Estados, uno israelí y otro palestino, basados en las fronteras de antes de la Guerra de los Seis Días, en junio de 1967, cuando Israel ocupó los territorios palestinos, una parte de los Altos del Golán sirios y la península egipcia del Sinaí.
Una posible anexión por parte de Israel de zonas de los territorios palestinos ocupados "no podría pasar sin respuesta", según dijo Borrell en su comunicado, como respuesta a las promesas de Netanyahu de extender la soberanía israelí sobre los asentamientos des Cisjordania antes de que el próximo 2 de marzo se celebren las terceras elecciones legislativas en menos de un año en Israel.
No obstante, el primer ministro israelí indicó hoy que el gobierno no se pronunciará sobre el tema antes de los comicios.
Hasta ahora, la UE se había mantenido prácticamente en silencio respecto al 'Acuerdo del Siglo', limitándose a señalar que "estudiarían la propuesta", aunque Borrell había dicho que se trataba de "una ocasión para relanzar los urgentes esfuerzos necesarios para una solución negociada y viable" al conflicto entre palestinos e israelíes.
El 'Acuerdo del Siglo' fue rechazado frontalmente por los palestinos, que ya habían anunciado que no lo aceptarían. El presidente palestino, Mahmud Abás, cargó contra el plan, al que definió como "la bofetada del siglo".
Jordania manifestó su rechazo a la propuesta de Trump a Borrell en una visita que efectuó a Amán. Jordania y Egipto son los únicos países árabes que han firmado la paz con Israel.
Borrell recalcó en su comunicado que la UE está a favor de resolver el conflicto y el estatuto final de los dos Estados —fronteras, Jerusalén, refugiados— a través de negociaciones entre israelíes y palestinos, a los que pidió que no tomen medidas unilaterales que violen el derecho internacional.