"La caja negra resultó gravemente dañada, solicitamos a la industria de defensa que ayude a repararla", dijo Hatami citado por la agencia Borna.
El 8 de enero, la defensa antiaérea de Irán, en medio de la tensión con Estados Unidos, derribó por error el Boeing 737 ucraniano que había salido de Teherán rumbo a Kiev.
En la catástrofe murieron 82 iraníes, 63 canadienses, 11 ucranianos, 10 suecos, siete afganos y tres británicos.
El accidente tuvo lugar horas después de que el Ejército iraní bombardeara dos bases militares estadounidenses en Irak en represalia por el asesinato del general Qasem Soleimaní, comandante de la fuerza de élite Quds del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria de Irán.
Las tropas estadounidenses asesinaron al general iraní el 3 de enero en un ataque aéreo lanzado en Irak.