"Nuestro homenaje a El Alto es a la vez un acto de reconocimiento por su lucha en defensa de la democracia, en la que ha entregado vidas enfrentando a la represión", dijo la legisladora, militante del opositor Movimiento Al Socialismo (MAS) de Evo Morales y representante alteña en el parlamento.
El MAS, que controla con más de dos tercios de votos las dos cámaras, ha decidido que la Asamblea Plurinacional (parlamento) sesione en El Alto a pedido de las organizaciones populares de esa ciudad, convertida en uno de los focos de mayor resistencia al gobierno de Áñez, afirmó Copa.
Copa fue la principal autoridad en ese desfile, en el cual se presentaron vecinos vestidos de negro en señal de duelo por los diez manifestantes muertos durante una operación policial-militar contra un bloqueo, durante las protestas que siguieron al golpe de Estado de noviembre pasado, que llevó a Áñez al Gobierno.
El 5 de marzo, las celebraciones alteñas organizadas por el parlamento incluirán una misa al aire libre y sesiones separadas de las cámaras de diputados y senadores, con agendas dominadas por proyectos de ley en beneficio de El Alto.
Una sesión bicameral está prevista para el 6 de marzo, el día del 35 aniversario de El Alto, jornada en la que las celebraciones oficiales estarán centradas en un desfile militar.
El 3 de marzo, Copa había advertido a Áñez que no sería bienvenida en El Alto, donde aseguró que predomina un sentimiento de rechazo al actual gobierno por la masacre de noviembre.
"Sería inoportuno que ella esté presente acá porque El Alto aún se encuentra de luto, El Alto todavía no ha olvidado lo que ha pasado en noviembre cuando el gobierno de transición ha sacado un decreto para sacar a los militares hacia la ciudad de El Alto. Queda en la memoria lo que ha pasado en 2003 y lo que ha pasado en octubre y noviembre del año pasado", dijo.
En noviembre de 2003, una operación militar contra manifestantes ordenada por el entonces presidente neoliberal Gonzalo Sánchez de Lozada dejó en El Alto más de 60 muertos.