De acuerdo con la encuesta, publicada el 19 de marzo, el 61% de los rusos confía en que los servicios médicos y epidemiológicos nacionales podrán proteger a la población ante la propagación del coronavirus. El 52% de los entrevistados tienen miedo de contraer la enfermedad, y el 18% lo teme mucho. Al mismo tiempo, el 11% está convencido de que no habrá una epidemia en Rusia, mientras que el 43% lo considera poco probable.
En cuanto a las medidas tomadas por el Gobierno ruso para detener el COVID-19, según Lvov, más de la mitad de los ciudadanos las considera suficientes.
"En gran medida, gracias a este factor de confianza en la suficiencia de las medidas en nuestro país no se produce el pánico", apuntó.
El especialista del Vciom resaltó que la situación es un poco diferente en las dos principales ciudades de Rusia, Moscú y San Petersburgo: el 62% de los encuestados que viven en estas urbes expresaron preocupación ante la posibilidad de contagiarse (frente al 52% a nivel nacional), pero solo una de cada diez personas (frente al 18% en todo el país) siente un fuerte temor por este motivo.
Lvov constató que, además de tener una infraestructura muy desarrollada y una gran densidad de población, las principales megalópolis, sobre todo Moscú, han registrado un número de contagios mucho mayor que otras regiones rusas.
Por eso sus residentes dieron "respuestas más pesimistas", comentó.
Al mismo tiempo, según el analista, un nivel más bajo de fuertes temores se debe a la buena circulación de la información sobre el peligro en Moscú y San Petersburgo.
Bien informados
El sociólogo subrayó que casi todos los encuestados afirmaron que están al tanto de la pandemia.
Al ser preguntado sobre las principales fuentes de información sobre el coronavirus, Lvov respondió que el estudio del Vciom no comprende este aspecto, aunque señaló que todos los medios son importantes, incluida la comunicación entre personas.
Además, advirtió que, entre los encuestados mayores de 60 años –los más vulnerables ante el coronavirus– , cerca de la mitad no supo qué responder a la pregunta sobre si considera alta la probabilidad de contraer el coronavirus, resultando ser el grupo de edad peor informado.
En una situación que cambia muy rápido, es importante precisar que el sondeo se llevó a cabo a mediados de marzo, cuando en Rusia había mucho menos casos de COVID-19 (actualmente son 1.036) y todavía no se aplicaban todas las medidas que están en vigor hoy en día.
El pasado miércoles, en un discurso televisado a la nación, el presidente Vladímir Putin anunció una serie de medidas para contrarrestar la propagación del COVID-19 y paliar sus consecuencias sociales y económicas.
En Moscú, la ciudad rusa más afectada por el coronavirus con 703 contagios, están implementadas las medidas más rígidas para frenar su propagación.
En la capital rusa se declaró el 5 de marzo un régimen de alerta elevada: está prohibido cualquier evento al aire libre, mientras en los eventos en espacios cerrados pueden participar un máximo de 50 personas. Más tarde las autoridades moscovitas cerraron las salas de cine, los locales de ocio, las clínicas dentales, y prohibieron todo tipo de eventos y actividades recreativos y de esparcimiento, de espectáculo, culturales, deportivas, de exposición y "otras con presencia física de ciudadanos".
Además, el jueves el alcalde de Moscú, Serguéi Sobianin, firmó un decretó, según el cual durante la semana no laborable se suspenderá el funcionamiento de una serie de establecimientos, entre ellos parques, tiendas, restaurantes, cafeterías, comedores y peluquerías.
Lvov aseguró que el Vciom, uno de los institutos de opinión pública más importantes de Rusia, seguirá monitoreando la situación en el país y publicando nuevas encuestas.