"Afrontamos la peor crisis de nuestra generación. Está en juego el futuro del proyecto europeo, elegimos entre una UE coordinada y solidaria o el individualismo", dijo el mandatario español en una serie de tuits publicados en la tarde de este 27 de marzo.
Afrontamos la peor crisis de nuestra generación. Está en juego el futuro del proyecto europeo, elegimos entre una UE coordinada y solidaria o el individualismo. Somos profundamente europeístas. Reclamamos una respuesta común a esta emergencia, garanticemos una recuperación justa.
— Pedro Sánchez (@sanchezcastejon) March 27, 2020
El trasfondo político de estas declaraciones se encuentra en una reunión del Consejo Europeo del 26 de marzo, en el que España e Italia —los dos países de la UE más afectados por COVID-19— se plantaron ante la negativa de Alemania y Países Bajos contra la emisión de bonos de deuda europea.
En su respuesta de este viernes 27 a través de las redes sociales, Sánchez recordó que un total de nueve líderes europeos respaldan abiertamente la puesta en marcha de "un instrumento de deuda común que facilite la recuperación" ante la crisis del coronavirus.
Sin embargo, los actores más solventes como Alemania y Países Bajos (cuya deuda no supera el 60% del PIB) son reticentes a embarcarse en ese camino con países como España, Francia, Italia, Grecia o Portugal, con deudas que rondan el 100% de su PIB, cuando no lo superan ampliamente.
Ante la falta de acuerdo, el Consejo Europeo dio un plazo de dos semanas a sus ministros de Economía y Finanzas (el Eurogrupo) para buscar fórmulas que generen consenso.
"Ayer, en el Consejo Europeo, otorgamos un mandato claro al Eurogrupo para que, en dos semanas, presente propuestas concretas de financiación adaptadas a la gravedad e intensidad de la crisis, utilizando todos los instrumentos de financiación europeos", añade Sánchez.
Ayer, en el Consejo Europeo, otorgamos un mandato claro al Eurogrupo para que, en dos semanas, presente propuestas concretas de financiación adaptadas a la gravedad e intensidad de la crisis, utilizando todos los instrumentos de financiación europeos. #EsteVirusLoParamosUnidos
— Pedro Sánchez (@sanchezcastejon) March 27, 2020
En estos mensajes, Sánchez lanza una advertencia muy específica, remontándose a la crisis financiera de 2008 para llamar la atención sobre el peligro que supone para la supervivencia de la Unión Europea obviar "las lecciones del pasado" y profundizar la brecha norte-sur.
"La UE debe aprender las lecciones del pasado y no volver a fallar a la ciudadanía. La respuesta europea debe ser solidaria, enfocada a los más vulnerables", argumenta el mandatario español.
El #COVID19 afecta a todos. No entiende de fronteras, género o clase. La UE debe aprender las lecciones del pasado y no volver a fallar a la ciudadanía. La respuesta europea debe ser solidaria, enfocada a los más vulnerables. Algunas instituciones de la UE ya lo están haciendo.
— Pedro Sánchez (@sanchezcastejon) March 27, 2020
En la noche del 26 de marzo el Gobierno español se mostró incluso más contundente y emitió un comunicado recordando que los errores de 2008 "sembraron semillas de desafección y división con el proyecto europeo y provocaron el ascenso del populismo".
Las tensiones en el seno comunitario propiciaron incluso el cruce de declaraciones subidas de tono entre dirigentes.
Ante estas declaraciones, el primer ministro portugués, Antonio Costa, salió a la palestra para defender a su país vecino calificando como "repugnantes" y "mezquinas" las palabras del ministro holandés.
Por su parte, la canciller española, Arancha Gonzalez Laya, en un tono más conciliador, hizo un llamamiento a Hoekstra para que todos los países arrimen el hombro en la respuesta a COVID-19.
"No hay tiempo para discusiones sobre supuestos pasajeros de primera o segunda clase. No es momento de defraudar a nuestros ciudadanos", señaló la canciller.
En su respuesta, González Laya destaca que "estamos en 2020, no en 2008" y subraya que el virus no es producto "del fallo de un sector o de un área geográfica", por lo que llama a dar una respuesta conjunta.
"La historia nos juzgará por lo que hagamos ahora", remata la respuesta de la jefa de la diplomacia española.