Cuarentenas peligrosas: ¿cómo proteger al grupo de riesgo del que poco se habla?

En tiempos de pandemia, para muchas personas el hogar puede convertirse en lugar de refugio, pero para muchas otras, todo lo contrario. Desde que el nuevo brote de coronavirus irrumpió en nuestra cotidianidad, organizaciones internacionales, instituciones y redes de contención feminista han advertido que la creciente necesidad de aislarnos para no propagar el virus, conlleva un ascendente riesgo de maltrato doméstico. 

El coronavirus es un problema mundial, pero vale recordar que la violencia contra las mujeres, niños y niñas, también. Aunque el hogar no debería ser un lugar de peligro, las investigaciones sobre violencia doméstica demuestran que sí lo es: en América Latina una de cada tres mujeres ha sufrido violencia física o sexual por parte de su expareja o pareja conviviente. El 77% de los delitos sexuales ocurre en las viviendas. 

Las pandemias son acontecimientos anormales, pero la violencia en el hogar, también. La relatora especial de la ONU sobre violencia contra mujeres, Dubravka Simonovic, lo reconoció así: "Para muchas mujeres y muchos niños, la casa puede ser un lugar de miedo y violencia, la situación se agudiza en el caso del confinamiento y la cuarentena total que se implementaron ante la pandemia de COVID-19". 

¿Qué hacer ante una situación de violencia? 

Aquí algunos consejos que pueden ayudar a muchas mujeres.

• Hablar de tu situación con personas de tu confianza: familiares, amigas/os, vecinas/os. Así podrás crear una red de personas que estén pendientes y a las que puedes avisar cuando estés en peligro, para que sean ellas quienes denuncien la situación de agresión por si tú no puedes hacerlo.
• Haz la denuncia policial, pero antes busca el asesoramiento y apoyo de los servicios especializados en violencia doméstica estatales y las organizaciones civiles.
• Ten presente que irte de tu casa porque te maltratan no es abandono de hogar.
• Si estás lastimada, recurre a cualquier centro asistencial, policlínica o emergencia móvil y pide un certificado por las lesiones constatadas.
• Evita estar sola cuando percibas que pueden agredirte.
• Si vives con el agresor, deja alguna ventana abierta y la puerta sin llave.
• Si el agresor no vive en tu casa, no le abras la puerta y si insiste en ingresar, llama a la Policía.
• Si tienes hijos, enséñales a utilizar tu red de apoyo para pedir auxilio.
• Si hay armas blancas o de fuego en tu hogar, escondelas.
• Si la discusión se inicia en la cocina, abandona ese lugar porque es muy peligroso: ubícate en un lugar cercano a la puerta de salida.
• Siempre ten a mano tu teléfono y un número de discado rápido al que puedas llamar por ayuda.

Muchos países de América Latina también cuentan con servicios especializados para tratar violencias hacia mujeres, niños y niñas, y en estas circunstancias especiales, han tomado medidas extra para ayudarles a prevenir y poder salir de una situación de violencia machista. 

En Uruguay

El Gobierno ha anunciado medidas relativas a la prevención y fortalecimiento del sistema de respuesta en relación a este tipo de situaciones. Entre ellas, destinó 4 millones de dólares al "programa de tobilleras" electrónicas para casos de alto riesgo de violencia doméstica. También amplió los cupos en hogares para madres con hijos que deban abandonar sus hogares.

En conferencia de prensa, la directora del Instituto Nacional de las Mujeres, Mónica Bottero, informó que la Suprema Corte de Justicia envió una circular a los jueces para que, de ser necesario, extiendan por 60 días la vigilancia electrónica (tobilleras) de agresores en casos de violencia doméstica.

También anunció la capacitación al personal de sanidad para identificar casos de violencia doméstica cuando visitan hogares, y se acordó con el Plan Ceibal que se puedan denunciar casos a través de las computadoras "Ceibalitas", que tienen los niños y niñas que cursan primaria. Esto, dijo Bottero, puede ayudar a que los niños hagan las denuncias desde su laptop.

Para pedir asesoramiento, las mujeres pueden llamar al 0800 4141, para denunciar y pedir atención de emergencia, al 911. 

La respuesta de Argentina ante la violencia doméstica

En Argentina quienes estén en peligro pueden llamar al número 114, aunque también pueden comunicarse vía WhatsApp en los números 11-2771-6463, 11-2775-9047 y 11-2775-9048, y por mail en linea144@mingeneros.gob.ar.

El Gobierno argentino ha instado a cualquiera que sepa de una situación de violencia de género a que brinde su apoyo.

"Te proponemos que te involucres, que estés cerca del modo en que puedas y que seas parte de una red de apoyo conformada por todxs quienes queremos que el derecho a una vida libre de violencias sea una realidad, para todas las personas", escribió en Twitter el Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad.

A su vez, junto a la Confederación Farmacéutica Argentina, lanzó la campaña 'Barbijo rojo', para que las mujeres que se encuentran en una situación de violencia puedan acercarse o llamar a la farmacia más cercana a su casa y pedir un Barbijo rojo; los funcionarios la ayudarán y se pondrán en contacto con especialistas. 

En México

El Instituto Nacional de Mujeres del país norteamericano informó que está disponible el teléfono de atención general de emergencias: 911. Sin embargo, muchas organizaciones, como la Red Nacional de Refugios, recomiendan generar redes de apoyo entre mujeres y contactarlos a ellos a los teléfonos: 5243-6432 y 01800 822-4460. 

La Red también anunció el lanzamiento de la campaña 'Aislamiento sin violencia. No estás sola', que está disponible tras una alianza con Twitter, en la que ofrecen el apoyo y orientación a las mujeres víctimas; contención confidencial y especializada. Según se explica en la red social, cualquier persona que busque en Twitter términos asociados con violencia contra la mujer, tendrá como resultado principal en el buscador de la plataforma una notificación que le da la opción de pedir ayuda.

En Colombia 

La Secretaria de la Mujer colombiana también anunció el fortalecimiento de la línea de atención a mujeres, más conocida como 'línea púrpura': 01 8000 112 137. También podrán contactarse a través de WhatsApp, al 300 755 18 46, donde encontrarán asesoría y protección las 24 horas, los siete días de la semana. 

Sin embargo, ante una emergencia las mujeres deberían llamar al 123, directamente a la Policía.