Las autoridades chinas comenzaron a investigar sobre la posibilidad de digitalizar su moneda desde 2014, aunque hasta 2017 iniciaron con el programa de desarrollo de e-RMB. Analistas chinos afirman que este proyecto tiene el objetivo de ofrecer a los inversores y las empresas una alternativa a la moneda de Estados Unidos.
La crisis sanitaria por la pandemia de COVID-19 no detuvo el desarrollo de la divisa. El 17 de abril, el Banco Popular de China adelantó que su investigación sobre la moneda se encontraba en su etapa final, por lo que comenzaría a realizar pruebas en varias ciudades, como Shenzhen, Suzhou, Chengdu y Xiong’an, área al sur de Pekín que será sede de los Juegos Olímpicos de Invierno de 2022.
Para Janneth Quiroz, e-RMB puede representar una alternativa funcional al sistema de liquidez a nivel internacional, cuya base es el dólar estadounidense.
"China, al empezar a introducir estos sistemas más avanzados, de una moneda digital respaldada por su Banco central, me parece que va un paso adelante en cuanto a Estados Unidos. Al estar tan relacionadas las economías, no me parecería extraño que algunas otras economías como Brasil, que tiene una alta integración con China, pudiera empezar a utilizar esta moneda para realizar transacciones internacionales", evaluó.
Asimismo, este proceso podría dar paso a una competencia abierta entre monedas, un aspecto que podría incidir en la demanda de dólares a nivel mundial en el mediano plazo.
estarán dejando de demandar dólares. Al disminuir la demanda por dólares, normalmente disminuye el precio. Entonces, lo que estaríamos viendo es la depreciación del dólar. Estados Unidos perdería ese poder que tiene ahora, al contar con la moneda más utilizada a nivel mundial", anticipó Janneth Quiroz.
Una de las principales bondades de ese estatus ha sido que Washington pueda enfrentar crisis como la asociada al COVID-19 mediante la emisión de más moneda para inyectar recursos a su economía. Pero, en un escenario donde e-RMB se consolide como divisa para transacciones internacionales, se podrían afectar también a monedas dependientes del valor del dólar, como el peso mexicano.
Por otra parte, el escenario de recesión económica que enfrenta el mundo ha sido clave para explicar la reciente depreciación de la moneda mexicana.
"Vemos depreciaciones tan significativas en nuestra moneda porque, al haber menor demanda o menos apetito por algunos instrumentos como es el caso del peso, los inversionistas que tienen pesos empiezan a deshacerse de ellos, porque implica un mayor riesgo en un escenario de tanta volatilidad e incertidumbre. Esto provoca que haya una enorme oferta de pesos y todo el mundo voltea a ver al dólar, porque es la moneda más liquida a nivel mundial, la que más se utiliza, la que está ligada a una economía fuerte, como es la de Estados Unidos", explicó Janneth Quiroz.
Sin embargo, un escenario de guerra monetaria se ve lejano, ya que la situación económica internacional hace muy difícil plantear esta competencia en los próximos meses. Por ello, para la subdirectora de análisis económico de Grupo Financiero Monex las primeras pruebas de la moneda virtual china serán fundamentales para observar cómo se podría posicionar esta divisa en el futuro.