"Vamos a solicitar que, en lugar de ser de 15 días, sea alrededor de un mes la vigencia de este último estado de alarma", explicó en rueda de prensa el presidente del Gobierno español.
Es la quinta ocasión en que el Gobierno pedirá a los partidos con representación parlamentaria que apoyen el estado de alarma desde fue declarado el pasado 14 de marzo.
La última tramitación de una prórroga en el Congreso estuvo marcada por la polémica, ya que varios partidos retiraron el apoyo al Gobierno y optaron por votar "no" a prolongar la medida.
Sin embargo, Sánchez obtuvo finalmente los apoyos parlamentarios necesarios para pasar la medida, que ahora busca ampliar hasta finales del mes de junio y por última vez.
El líder del Ejecutivo español aclaró que la última prórroga que propone a los partidos es "diferente", ya que implica que el ministro de Sanidad, Salvador Illa, será el mando único a cargo de la gestión del periodo.
"La desescalada puede acabar en la mitad del país con el inicio del verano", añadió el presidente, tras apelar a la "prudencia" de la ciudadanía para evitar que se produzcan nuevos brotes del coronavirus durante el desconfinamiento.
Sánchez admitió que los españoles no podrán recuperar la total libertad de circulación en las próximas semanas, pero insistió en que este es "el único camino posible" para superar la epidemia.
"El único camino hacia la recuperación económica pasa por superar de una vez por todas esta emergencia sanitaria", afirmó el presidente español.
