"La decisión de China de imponer una nueva ley de seguridad nacional en Hong Kong radica en un conflicto directo con sus obligaciones internacionales (…) La ley propuesta socavaría la idea de un país, dos sistemas", se afirma en el comunicado.
La idea de 'Un país, dos sistemas' fue propuesta por el Gobierno chino durante las negociaciones con Inglaterra por la cesión de Hong Kong (en poder británico), consumada en 1997.
Esta doctrina permite que Hong Kong mantenga autonomía para establecer un sistema político y económico distinto al que establece Pekín.
Más temprano este jueves 28 de mayo, el parlamento chino aprobó una resolución para imponer la ley de seguridad nacional que prohíbe las actividades secesionistas y subversivas en Hong Kong.
Los cuatro países sostuvieron que la supuesta reforma en Hong Kong aumenta la posibilidad de enjuiciamiento por razones políticas y socava los compromisos existentes para proteger los derechos del pueblo de Hong Kong.
Los firmantes también instaron al Gobierno de China a trabajar con la administración de Hong Kong para encontrar un "acuerdo mutuo aceptable" que cumpla con las obligaciones internacionales.
El 24 de mayo el asesor de seguridad nacional de EEUU, Robert O'Brien, declaró en una entrevista con el canal de televisión NBC que Washington puede imponer sanciones contra China si Pekín "toma" Hong Kong mediante la ley de seguridad nacional.
Pekín ha declarado en repetidas ocasiones que la interrupción en Hong Kong es el resultado de la interferencia extranjera.