"Los trajecitos que nos ponemos por debajo, el quirúrgico, no están dándonos; la semana anterior aceptamos usarlos lavados, reutilizados, pero en esta semana cómo han mandado a lavar toda la semana se han roto, ya no tenemos", dijo a la cadena televisiva Ecuavisa, Luisa Riera, auxiliar de enfermería de la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del hospital Enrique Garcés, ubicado al sur de Quito, capital de la nación andina.
Pese a no contar con prendas de protección adecuadas —dijo otro empleado—, auxiliares de enfermería y trabajadores de la salud deben usarlas por presión de los jefes de esa casa de salud, perteneciente a la red de hospitales del Ministerio de Salud Pública de Ecuador.
También presentaron imágenes que mostraron falta de higiene en el sistema de almacenamiento de agua del hospital.
"El agua tiene una nata verde, venimos reclamando desde hace meses y no ponen atención", comentó Galo Llupangui, dirigente del sindicato de trabajadores del hospital Enrique Garcés, uno de los más grandes de la capital de Ecuador.
El Enrique Garcés es uno de los 14 hospitales del Ministerio de Salud Pública que se encuentran bajo investigación por supuestos sobreprecios en la compra de insumos médicos para atender la emergencia sanitaria por COVID-19, según informó a inicios de mayo el titular de esa cartera, Juan Carlos Zevallos.