Unas 3.000 familias de Lugo, al noroeste de España, dependen de la fábrica Alcoa como única fuente de empleo. El pasado martes, la compañía estadounidense anunció el despido de 534 trabajadores de la planta de San Cibrao, en la costa de Lugo por "problemas estructurales", "altos costes de energía" y "bajo precio del aluminio", como lo han indicado en un comunicado.
Dani, hijo de uno de los trabajadores, confiesa en su canal de youtube lo que ha significado para ellos el desmantelamiento en España de la tercera empresa productora de aluminio más grande del mundo.
Los trabajadores de Alcoa llevan varios años denunciando los intentos de desmantelar la fábrica en Galicia. Dani confiesa que ninguna explicación que le ha intentado dar su padre le ha convencido.
"Me explicó por qué cierra (la fábrica) y no entiendo ¡si son los mejores haciendo aluminio! Yo quiero poder trabajar ahí también como mis padres y mis abuelos, aunque no sea en el aluminio, pero poderme quedar aquí como hicieron ellos. Pedro Sánchez, ojalá que llegues a ver este vídeo y, por favor, que nos intentes ayudar".
Desde que se anunciaron los despidos, los trabajadores y muchas familias de Lugo se mantienen movilizados en las calles y piden al presidente Pedro Sánchez que evite el cierre de la fábrica. Entre las propuestas que ponen sobre la mesa está la intervención temporal con "parte o la totalidad del accionariado" para así "dar viabilidad a la empresa" y evitar que miles de familias de Lugo se queden sin empleo. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha dicho en el Congreso de los Diputados que "está buscando inversores" para intentar salvar la planta de Alcoa en Galicia.