"La pandemia de COVID-19 ha impactado seriamente la respuesta al sida y podría deteriorarla aún más", dice una declaración de la organización publicada este 6 de julio en su página web.
Se explica que "una interrupción completa de seis meses en el tratamiento del VIH podría causar más de 500.000 muertes adicionales en África subsahariana durante el próximo año (2020-2021), devolviendo a la región a los niveles de mortalidad por sida de 2008".
"Se requiere de una acción decisiva todos los días en la próxima década, para que el mundo vuelva a su camino para poner fin a la epidemia de sida para 2030", afirmó la directora ejecutiva de Onusida, Winnie Byanyima.
Este lunes 6 de julio Onusida publicó su informe anual "Aprovechando el momento" donde destacó avances notables en la lucha contra el VIH: millones de vidas fueron salvadas y múltiples casos de contagio del VIH fueron prevenidos gracias a la ampliación de la terapia antirretroviral.
Sin embargo, 690.000 personas fallecieron de las enfermedades relacionadas con el sida el año pasado y 12,6 de los 38 millones de personas que viven con el VIH no tuvieron acceso al tratamiento adecuado.
De esta manera, indica Onusida, los objetivos globales en la lucha contra el VIH establecidos para 2020 no se alcanzarán debido a las graves interrupciones en los servicios por la pandemia.
Para combatir el VIH y el coronavirus, Onusida y sus socios llaman a los Estados a crear una vacuna "popular" contra el nuevo coronavirus que esté disponible en gran cantidad para todas las personas y de forma gratuita, así como aumentar inversiones en la lucha contra ambas enfermedades.