Según un informe del privado Centro de Recursos para el Análisis de Conflictos (Cerac), titulado Reporte del conflicto con el ELN, en el primer semestre de 2020 ocurrieron "73 acciones ofensivas atribuidas al ELN, un 22% más que las registradas en los primeros seis meses de 2019", cuando se dieron 60 acciones.
"Este aumento de acciones se explica en gran parte por el paro armado que hizo esa organización guerrillera entre el 14 y el 17 de febrero, periodo en el que Cerac registró 28 acciones ofensivas y 7 combates", indicó el centro de estudios en su reporte, con fecha del 7 de julio.
Según el reporte, si se excluye el periodo de cuatro días del paro armado, las acciones ofensivas y los combates se redujeron en 25 y 4%, respectivamente, frente a los registros del primer semestre de 2019.
Pese al aumento de la violencia del ELN durante el primer semestre de 2020, el Cerac detalló que se observa una reducción en el número de muertes del 35%, al pasar de 49 muertes registradas en el primer semestre de 2019 a 32 muertes en 2020.
En lo que respecta al pasado junio, el Cerac registró cuatro acciones ofensivas atribuidas al ELN, en las cuales murió un civil y fue secuestrada una integrante del Ejército que después fue entregada ante una comisión humanitaria.
Asimismo, en ese mes se presentaron cinco combates entre la Fuerza Pública y el ELN en los que murieron cuatro personas.
En esas acciones murieron cuatro civiles y tres integrantes del Ejército.
El 7 de julio, el ELN dirigió una carta al Gobierno colombiano para proponerle un cese del fuego bilateral por 90 días, pero el presidente Iván Duque declinó esa iniciativa al señalar que se trata de un grupo terrorista frente al cual se mantendrá el combate, al tiempo que le pidió liberar a los secuestrados que mantiene y cesar sus atentados.
En febrero de 2019 el Gobierno colombiano rompió de manera unilateral las negociaciones de paz con el ELN que se desarrollaban desde el anterior gobierno de Juan Manuel Santos (2010-2018), luego de que esa guerrilla se adjudicó un atentado con un vehículo cargado con explosivos en una escuela de cadetes de la Policía, en Bogotá, que dejó 22 estudiantes muertos y 60 más heridos el 17 de enero de ese mismo año.
