"No vemos la decisión de AMLO [de ir a Washington] como un insulto hacia el partido demócrata o los estadounidenses. [Lo consideramos] un intento de Trump de ganar más voto latino, que nos parece improbable porque no creemos que los latinos vayan a olvidar todo lo que ha dicho desde el inicio de su primera campaña [presidencial] en 2016", dijo Daniel Stein, representante demócrata en el extranjero a Infobae.
En el marco de la reunión bilateral, el candidato presidencial de los demócratas, Joe Biden, se pronunció en mismo sentido en su cuenta de Twitter
"Trump lanzó su campaña de 2016 llamando violadores a los mexicanos. Desde entonces él ha propagado el racismo contra nuestra comunidad latina. Necesitamos trabajar en sociedad con México. Necesitamos restaurar la dignidad y la humanidad en nuestro sistema de inmigración. Eso es lo que haré como presidente", señaló el 8 de julio.
Un día después, el Caucus Hispano en el Congreso estadounidense, una organización donde participan 38 legisladores demócratas para dar voz a la población hispana en la Unión Americana, aseveró que la reunión entre Trump y López Obrador buscó politizar las relaciones México-Estados Unidos, al tiempo que distrajo sobre la situación de la epidemia de COVID-19.
Tras estos comentarios, Daniel Stein reiteró que la molestia de los demócratas sobre la visita del presidente mexicano se centra en el intento de Donald Trump para utilizar el encuentro como una herramienta para ganar el voto de los latinos.
Sin embargo, dijo que esta situación no preocupa a su organización partidista, ya que están seguros de que un hecho aislado no ayudará borrar la manera en la que Trump se ha referido a los migrantes en la Unión Americana.