Según informó la Policía Federal en un comunicado recogido por el diario O Globo, el accidente se produjo a las 23 horas del 20 de julio, cuando motos y carros entraron en el recinto del aeropuerto en busca del globo, algo que "podría haber causado un accidente aéreo de proporciones gigantescas".
El lanzamiento de globos de grandes proporciones no tripulados está asociado en Brasil a fiestas populares y está prohibido por ley, por el peligro tanto para la aviación como para el medio ambiente, porque al caer pueden provocar incendios forestales, ya que se impulsan con fuego de forma artesanal.
La caída del globo en el aeropuerto de Río de Janeiro provocó un encontronazo con la policía, y aunque el grupo no consiguió recuperar el artilugio, sí logró escapar.
"La osadía de estas personas fue tamaña que además de los varios vehículos que invadieron el aeropuerto estos marginales utilizaron en la fuga incluso una embarcación marítima, que después de intercambiar tiros con policías civiles y federales consiguió escapar por la bahía de Guanabara", dice la nota de la Policía Federal.
La empresa RIOgaleao, que administra el aeropuerto internacional de Río de Janeiro, informó que la operación del aeropuerto no se vio afectada en ningún momento y que colabora con la investigación a través de las imágenes registradas por las cámaras de seguridad.