"Luego de varios meses de negociación, Argentina consolidó una propuesta que compatibiliza las posibilidades de crecimiento con el cumplimiento de las obligaciones contraídas, además de reducir las erogaciones futuras", sostuvieron los empresarios en un comunicado.
La Unión Industrial Argentina (UIA), la Asociación de Bancos Argentinos (Adeba), la Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC), la Cámara Argentina de la Construcción (Camarco), la Bolsa de Cereales de Buenos Aires y la Sociedad Rural Argentina (SRA) señalaron que la última oferta presentada por el Gobierno muestra "la voluntad del país de despejar las incertidumbres del horizonte financiero".
Los empresarios pidieron a los acreedores externos que cooperen ellos también para alcanzar un acuerdo, puesto que "con su última oferta, nuestro país procura responder de buena fe a los requerimientos de su contraparte".
Tanto los bonistas como las autoridades pueden avanzar en dos prioridades convergentes, añadió el G-6: el desarrollo integral de Argentina y la garantía de que el país va a honrar sus compromisos.
El ministro de Economía, Martín Guzmán, así como el presidente Alberto Fernández, rechazaron esta semana la única contraoferta que presentaron tres grandes fondos de inversión, los cuales firmaron un acuerdo en el que se comprometen a no aceptar la última oferta del país sudamericano para reestructurar su deuda soberana.