"Llegué aquí para expresar la amistad y la hermandad de nuestro país al pueblo libanés. También quiero escuchar, hacer conclusiones y ayudar a organizar el apoyo internacional a Beirut y a la población del Líbano", dijo a los periodistas tras una breve reunión con el presidente del Líbano, Michel Aoun, que se celebró en el aeropuerto y se transmitió en la página de Facebook del Palacio Elíseo.
Francia envió al Líbano dos buques militares y un avión con medicamentos y un equipo de médicos, recordó Macron e informó que está por llegar un avión más con brigadas de policías y de jueces de instrucción.
"Los próximos días organizaremos una ayuda adicional a niveles de Francia y Europa. Me gustaría organizar la coordinación a nivel europeo y la cooperación internacional. Francia promoverá en las próximas horas unas iniciativas partiendo de nuestros contactos con las brigadas y las autoridades del Líbano", dijo el presidente Francés agregando que irá al puerto de Beirut para reunirse con las brigadas de los socorristas y con representantes de las ONGs.
Macron también planea reunirse con las fuerzas políticas del Líbano.
La fuerte explosión que se produjo el 4 de agosto en el puerto marítimo de Beirut, cerca de una base naval del Líbano, destruyó y dañó decenas de viviendas y automóviles, causó al menos 137 muertos y cerca de 5.000 heridos, dejó a unas 300.000 personas sin hogar, también hay muchos desaparecidos, según los últimos datos.
En el país se declararon tres días de luto y el estado de emergencia por dos semanas.
Se estima que la explosión fue provocada por el almacenamiento inadecuado de 2.750 toneladas de nitrato de amonio en el puerto. La tragedia se agrava por la crisis económica y financiera que el Líbano está afrontando desde hace seis meses.