Tatyana Borísova conoció Colombia a raíz de un programa de intercambios que le surgió y supo aprovechar. "Ese programa era para los jóvenes recién graduados que todavía no tenían experiencia laboral. Mi proyecto era enseñar inglés a los niños en Colombia; llegué por un año y volví después a Rusia", dijo a Sputnik.
Sin embargo, tiempo después recibió un ofrecimiento laboral del país sudamericano y no lo pensó dos veces. La empresaria y profesora siberiana regresó así al lugar donde la hicieron sentir como en casa.
En febrero de 2012 se radicó en Colombia, donde, además de tener su emprendimiento, enseña idioma ruso e inglés en una importante institución educativa de Medellín.
Respecto a donde eligió quedarse a vivir, expresó que Colombia tiene varias cosas que le gustaron mucho y la hicieron regresar. "El factor económico y laboral también, porque para mí es más fácil encontrar trabajo como docente de idiomas en Colombia que en Rusia. Eso fue muy atractivo", explicó.
"En este momento trabajo en una Universidad bastante grande, privada, y también tengo mis alumnos particulares", agregó Tatyana.
Refiriéndose a la comida local, dijo que le encanta y que no le costó nada acostumbrarse a ella: "Yo comía de todo y engordé bastante al principio; hay muchos fritos, empanadas o arepas fritas, pero con los años perdí un poco ese gusto. Hoy no me gustan tanto los fritos y estoy más para el lado de la comida saludable", confesó.
Al principio, llevaba adelante la empresa junto a una amiga, Katerina, quien luego de un tiempo se fue a vivir a EEUU. Tatiana quedó al frente del negocio junto a su pareja Alen Sokolov —también de origen ruso— con quien hace tres años está casada.
"Todo comenzó con chalinas mías que a algunas de mis compañeras colombianas les encantaba. Entonces traje algunas para regalar primero y después para vender; participaba por ejemplo en ferias o parques, en eventos”, explicó la empresaria sobre el inicio de su negocio.
Borísova trata de estar en contacto permanente con los rusos residentes en suelo colombiano para mantener viva la cultura, costumbres y tradiciones de su tierra natal.
"Acá en Medellín hay unos setenta u ochenta, tenemos nuestra pequeña comunidad. Tengo amigas rusas, nos juntamos para las celebraciones, cumpleaños o simplemente los fines de semana para vernos, hacer karaoke, cocinar comidas rusas", señaló Borísova sobre su relación con los inmigrantes de su tierra.
Destino Rusia se escucha los sábados a las 12 del día (-3 GMT) por M24 en Uruguay (97.9 FM en Montevideo y 102.5 FM en Maldonado).