"Si se cumple este pedido, inmediatamente nosotros nos desmovilizamos. Hemos planteado formalmente esto al Tribunal Electoral y a la presidenta de la Asamblea [parlamento], Eva Copa", dijo el líder de la COB, Juan Carlos Huarachi, en una rueda de prensa.
La gobernante enfrenta también presiones desde los sectores más conservadores del país, en particular del Comité Cívico de Santa Cruz (este), que en la noche del 11 de agosto resolvió exigir al Gobierno la anulación del proceso electoral y el uso de la fuerza para disolver los bloqueos iniciados el 3 de agosto.
24 horas
Huarachi, acompañado por dirigentes del Pacto de Unidad de organizaciones indígenas y vecinales, dijo que los bloqueos y otras protestas serán "radicalizados hasta las últimas consecuencias" si el TSE y el parlamento no aceptaban su propuesta en un plazo de 24 horas.
Huarachi evitó opinar sobre los pedidos de renuncia presidencial y remarcó en cambio que las elecciones son una demanda planteada por los movimientos sociales desde noviembre de 2019, tras el derrocamiento de Evo Morales (2006-2019) y antes del pacto político que dio paso al proceso electoral.
"Si nos convocan a cualquier diálogo vamos a acudir, éste es un movimiento por la vida y por la recuperación de la democracia", dijo a su vez el líder de los campesinos colonizadores, Henry Nina, cuyo sector bloqueaba principalmente rutas del rico departamento de Santa Cruz.
Nina negó que los bloqueos sean la causa principal de la actual escasez de oxígeno en los hospitales que atienden el COVID-19, algo denunciado por el Gobierno como atentado a la salud, y aseguró en cambio que el oxígeno, diversos insumos médicos y hasta medicamentos básicos, escasean en Bolivia desde hace varios meses.
Presión cívica
Entretanto, el Gobierno guardaba silencio ante la amenaza del movimiento cívico de Santa Cruz, liderado por el sector empresarial, de emprender por cuenta propia acciones de desbloqueo de las rutas de esa región si las fuerzas del orden no lo hacían antes de este 13 de agosto.
"Damos un plazo de 48 horas al Gobierno para desbloquear todas las vías de nuestro territorio departamental, porque nuestra juventud, los hombres y mujeres de este pueblo, vamos a asumir la defensa de nuestro territorio", dijo el líder cívico cruceño, Rómulo Calvo.
Calvo anunció que la asamblea de instituciones de ese comité decidió también exigir la renuncia del presidente del Tribunal Electoral, Salvador Romero, acusándolo entre otras cosas de no haber inhabilitado al Movimiento Al Socialismo (MAS), liderado por Morales.