La Cancillería argentina "subrayó que la vía electoral es el único modo de establecer un camino consensuado en la República Bolivariana de Venezuela", indicó el organismo en un comunicado.
A través de su vicecanciller, Pablo Tettamanti, la nación sudamericana objetó que el Grupo de Lima advierte desde el exterior que esa vía electoral no sirve
"Ni el Grupo de Lima ni otros Estados o grupos de Estados pueden decirle desde el exterior a un venezolano, ya sea que se incline por votar a la oposición o se incline en favor del actual gobierno, que su sufragio no vale".
La democracia, que "es exactamente lo contrario a promover la violencia", implica "actividad política y respeto a los votantes".
En un duro comunicado, la nación sudamericana discrepó sobre la falta de acción del Grupo de Lima para que las elecciones legislativas tengan lugar en diciembre.
"Sería un modo, no aceptable, de pretender que se avanza en procesos tendientes a fortalecer las instituciones democráticas mientras se muestra solo una disposición a discutir el levantamiento de sanciones económicas, que por otra parte la Argentina siempre consideró reprobables", observó.
Riesgo de más violencia
El Gobierno de Alberto Fernández también alertó sobre "la adopción de posturas externas no realistas que sólo pueden conducir a situaciones de violencia".
La delegación argentina también señaló que hay informaciones que trascendieron en los medios de comunicación que especulan "con campañas para contratar mercenarios".
La Cancillería del país sudamericano no comparte, por lo tanto, la decisión de algunos partidos políticos de no presentarse a los comicios y de llamar a la abstención, puesto que ello agrava la fractura político-social que existe en Venezuela "y marginará a importantes sectores de la ciudadanía que quedarán sin representación política".
Es decir, que esa postura "dejaría a muchos ciudadanos venezolanos sin el instrumento válido para defender sus derechos en la Asamblea Nacional".
Argentina, no obstante, entiende el rechazo de muchos sectores de la oposición, que, acompañados por los países del Grupo de Lima, rechazan algunas disposiciones que fueron tomadas en relación a las elecciones.
Éstas son "la designación de los directivos del Consejo Nacional Electoral, las autoridades de algunos partidos políticos y la inhabilitación de cambios en el número de diputados y las circunscripciones electorales".
"Sin embargo, la Cancillería subraya una vez más la importancia de la participación de todos los sectores en las próximas elecciones", concluyó.
El Grupo Internacional de Contacto, que aboga también por facilitar el acceso y por aumentar la ayuda humanitaria que recibe Venezuela, reúne a Argentina, Bolivia, Costa Rica, Ecuador, la Unión Europea, Francia, Alemania, Italia, Países Bajos, Panamá, Portugal, España, Suecia, Reino Unido y Uruguay.
El Grupo de Lima, una entidad fundada en agosto de 2017 que reclama la celebración urgente de elecciones en la nación caribeña, está integrado por Argentina, Bolivia, Brasil, Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Guatemala, Honduras, Panamá, Paraguay, Perú y Santa Lucía.