Parley "informó que su país proporcionó mucha ayuda y está listo para hacer aún más, incluido el envío de maquinaria para labores de desescombro, también seguirá realizándose la ayuda alimentaria y evaluación de daños. Alrededor de 750 soldados franceses, que llegarán hoy [el 14 de agosto], participarán en todas las misiones,", escribió el servicio de prensa del palacio presidencial.
Al menos 171 personas murieron, más de 6.000 resultaron heridas y alrededor de 300.000 se quedaron sin techo después de que 2.750 toneladas de nitrato de amonio, almacenadas de forma inadecuada desde 2014 en el puerto de Beirut, detonaran el 4 de agosto.
La explosión desató una nueva espiral de violentas protestas antigubernamentales en la capital libanesa y provocó la dimisión del Gobierno.