Durante ese encuentro, celebrado el 25 de agosto de 1985, Jordan rompió un tablero de cristal con la pelota.
La zapatilla izquierda tiene aún un trozo de vidrio en la suela.
"Fue un momento icónico en la historia del deporte", declaró a los medios Caitlin Donovan, jefa de ventas de carteras y zapatillas de Christie's.
El calzado, firmado por el propio atleta, tenía un precio estimado de entre 650.000 y 850.000 dólares. Sin embargo, se vendió por un precio de 615.000, rompiendo el récord de las Air Jordan que se subastaron por 560.000 dólares —tres veces su precio estimado— en mayo.
En julio, la casa de subastas puso en venta 11 pares de zapatillas fabricadas por Nike para la superestrella del baloncesto. Recaudó un total de 931.875 dólares.
