"No, no voy a postularme", dijo en declaraciones a la cadena Belsat.
Este viernes, la excandidata presidencial, que actualmente se encuentra en Lituania, comunicó que regresará a su país cuando se sienta segura allí.
Bielorrusia es escenario de fuertes protestas a raíz de las presidenciales del 9 de agosto, que revalidaron para un sexto mandato al presidente Alexandr Lukashenko, en el poder desde 1994.
Según el escrutinio oficial, Lukashenko obtuvo el 80,1% de los votos, seguido de Tijanóvskaya con el 10,12% de los apoyos. Los otros tres candidatos reunieron juntos poco más del 4%.
La oposición del país no reconoció los resultados de los comicios e insiste en que su candidata Svetlana Tijanóvskaya sea reconocida como ganadora de las presidenciales.
Según el Ministerio del Interior, centenares de personas sufrieron heridas, incluidos más de 150 agentes del orden público, y más de 6.700 personas fueron detenidas. Tres personas fallecieron.
La violencia disminuyó en los días siguientes, pero las protestas continuaron y trascendieron de la calle a algunas cadenas de televisión públicas y compañías industriales, que se declararon en huelga.