"En relación con la acción hostil de las autoridades noruegas, que el 18 de agosto declararon a un diplomático ruso persona non grata, el embajador del Reino de Noruega en Moscú, Rune Resaland, fue citado al Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia y le informamos que, en represalia, uno de los diplomáticos de alto rango de la Embajada de Noruega también fue declarado persona non grata. Su acreditación en la Federación de Rusia terminará dentro de tres días. Este es el período que los noruegos asignaron para la salida de nuestro empleado", dijo el Ministerio en un comunicado.
Moscú advierte que la "política destructiva" aplicada por parte de las autoridades noruegas, "afecta negativamente el clima de las relaciones bilaterales".
"La responsabilidad de las consecuencias de tal política recae enteramente en Oslo", agregó la Cancillería rusa.
Por su parte, una fuente informada reveló a Sputnik que el diplomático noruego expulsado es el consejero de la Embajada, Jan Flaete.
Según el Ministerio de Exteriores del país nórdico, la expulsión de su empleado fue "absolutamente infundada".
"El diplomático no violó ninguna regla y actuó completamente en el marco de las normas diplomáticas", declaró la Cancillería noruega a Sputnik.
Este 28 de agosto el Ministerio de Exteriores de Rusia había citado al embajador de Noruega, Rune Resaland, para que diera explicaciones por la expulsión de su diplomático de Oslo.
La firma DNV GL lleva desde años cooperando con empresas rusas del sector del petróleo y el gas, la construcción naval y grandes proyectos de infraestructura, una colaboración que las autoridades noruegas jamás habían cuestionado antes.
El PST noruego afirma que el empleado de DNV GL supuestamente entregó "secretos de estado" al diplomático ruso.
El 19 de agosto, el Gobierno noruego anunció la expulsión del diplomático argumentando que realizaba presuntas "acciones incompatibles con su cargo".