La posibilidad de vender un inmueble y permanecer en él se basa en la existencia de la llamada nuda propiedad. Este concepto permite dividir una propiedad plena en dos derechos: el de nuda propiedad y el de usufructo. Un propietario puede vender su terreno, vivienda o campo, y conservar su derecho de uso por un tiempo determinado o de por vida.
Movidas por el interés de desarrollar esta modalidad en Uruguay, dos jóvenes fundaron hace tres años la compañía NudaProp, plataforma que reúne y gestiona las necesidades de oferentes y demandantes de este especial mercado.
"Me comentó una amiga de mi madre, que es italiana, que quería vender la nuda propiedad y ahí tomé conocimiento de esta fantástica modalidad en la cual tanto para el vendedor como para el comprador hay un beneficio", dijo a Sputnik Constanza Boix, socia fundadora de la empresa.
"Para nosotros esa novedad debería de tener mayor difusión porque significa una mejora económica por el ingreso extra a partir de la rentabilización de la propiedad. Y por otro lado es accesible para inversiones en propiedades a precios más bajos", agregó.
Según explicaron a Sputnik, el precio de las propiedades se determina en función de distintas variables, en las que la edad es central, especialmente en casos de usufructuarios vitalicios. Además se considera la localización, el valor regular del inmueble y el margen de rentabilidad del inversor.
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