"El 7 de septiembre de 2020 las tropas del Ejército Popular de Liberación de China intentaron acercarse a una de nuestras posiciones de vanguardia ubicadas en la Línea de Control Actual y (...) realizaron varios disparos al aire en un intento de aterrorizar a nuestras tropas", dice el comunicado.
La nota subraya que los militares indios "no cruzaron la Línea de Control Actual ni recurrieron a métodos de agresión, incluido tiroteo".
"Es precisamente el Ejército Popular de Liberación de China el que viola de manera grave los acuerdos y realiza unas maniobras agresivas en paralelo con una continua cooperación militar, diplomática y política", afirmó el ente castrense indio.
La situación en Ladakh se agravó en mayo de 2020 después de que unos 250 soldados chinos e indios se enfrentaran en la zona de Pangong Tso. La violencia, que se prolongó hasta el día siguiente, causó más de 100 heridos en ambos bandos y cesó tras una reunión de jefes locales. Ambas naciones desplegaron entonces tropas adicionales en la zona.
El 15 de junio se produjo un nuevo enfrentamiento cerca del río Galwan que se saldó con decenas de soldados muertos y heridos de ambas partes.
Los días 29 y 30 de agosto se registraron unos nuevos choques armados entre los militares indios y chinos en la Línea de Control Actual. Las partes se acusaron mutuamente de realizar provocaciones y romper los acuerdos alcanzados.
El 6 de septiembre, en unas negociaciones celebradas en Moscú en el marco de la reunión de titulares de Defensa de los países de la Organización de Cooperación de Shanghái, la Comunidad de Estados Independientes y la Organización del Tratado de la Seguridad Colectiva, los ministros de Defensa de China y la India acordaron cumplir con los pactos ya alcanzados y esforzarse para rebajar las tensiones en la frontera.